6 mar 2016

El hambre



Por Horacio Muñoz/ Reseña /Foto: eldiario.es
Hay un libro más estremecedor que La Biblia aunque quizá con menos alcance literario (La biblia es todos los libros). Este libro del que quiero hablar no tiene esos cantos sensuales del Cantar de los cantares, ni la filosofía brutal del Eclesiastés, ni las multiplicaciones de ángeles e instrumentos de viento que suenan en el fin de los tiempos en el Apocalipsis. El apocalipsis, tal vez, se ha venido dejando narrar de maneras como las que utiliza Martín Caparrós en su libro de letras grandes y mayúsculas:
EL
HAM
BRE

Un libro estremecedor publicado en el año 2014 y llevado a cabo con el auspicio de Naciones Unidas por el periodista argentino Martín Caparrós. 

Es un viaje por el mundo del HAMBRE, por esos rincones del planeta que en nuestra cultura quedan sepultados por los chismes de la farándula de Hollywood o el reality show de la política mundial o local, da igual. Mientras tanto, o entre tanto, el hambre arrecia. 

Y el clima ayudará mucho.


Durante los últimos días parece obligado el asunto climático. Pero de fondo está el asunto de los alimentos. Sin agua, con un fenómeno del Niño en crescendo, con ese nombre de “Niño” para hacerlo como en diminutivo para no alarmar a nadie, el HAMBRE asoma.Y es un HAMBRE experimentada, la Gran Genocida.

Y viene de países como Níger, de ciudades como Calcuta, Bombay, Daca, donde el hambre arrecia y la vida humana, por multitudinaria, vale poco.


El libro HAMBRE azara con esta nota de contraporda: “si usted se entusiasma y lo lee en –digamos- ocho horas, en ese lapso se habrán muerto de hambre unas ocho mil personas (...) O sea que, probablemente, usted preferiría no leer este libro".

“Pero usted sí leyó este breve párrafo en medio minuto; sepa que en ese tiempo sólo se murieron de hambre entre ocho y diez personas en el mundo”.


A nadie le agrada dar la noticia de un genocidio de tamañas dimensiones. 2.000 millones de personas sufren malnutrición, casi un tercio de los hombres y mujeres de planeta, informa Caparrós.


Las mujeres son el 60% de los hambrientos del mundo. 

“Cada día, 300 mujeres se mueren en el parto por anemia. Y mil parturientas más se mueren por otras deficiencias nutricionales”.


“Cada año, más de tres millones de chicos se mueren a causa del hambre y las enfermedades –tos, diarreas, rubeolas, malarias- que el hambre favorece”. 

“Tres millones de chicos son 8.000 chicos muertos cada día, más de 300 cada hora, más de cinco en un solo minuto”.


Qué efímera se ha vuelto la vida humana. Hacia el centro del libro Martín Caparros muestra donde es que ese mercado de muertos genera riqueza. Porque si hay hambre no es por falta de alimentos.